Evaluacion de Agilidad de Aprendizaje: Evalúe la capacidad de aprendizaje de sus candidatos

Cuando se les presenta la oportunidad de aprender, no todas las personas adquieren los mismos conocimientos, ni pueden aplicar ese aprendizaje en situaciones beneficiosas. La agilidad de aprendizaje es el rasgo que explica estas diferencias entre los individuos. Se refiere a la capacidad y voluntad de una persona para adquirir nuevos conocimientos. Los candidatos con agilidad de aprendizaje pueden adquirir rápidamente nuevas habilidades y conocimientos. Además, los empleados con esta capacidad pueden desempeñar distintas funciones según las necesidades del puesto o de la empresa.  

La prueba de agilidad de aprendizaje es una herramienta que permite identificar y desarrollar el talento con alto potencial. Puede ayudar a las organizaciones a identificar a las personas con capacidad de aprender de forma ágil, las cuales resultan imprescindibles para el éxito a largo plazo. Una vez identificados, estos candidatos con gran potencial pueden formarse para integrar la base de futuros líderes. La prueba de agilidad de aprendizaje también tiene en cuenta la capacidad y voluntad de aprender del candidato, para identificar a las personas con agilidad para el aprendizaje.  

Diseñadas por especialistas, las pruebas de agilidad de aprendizaje ayudan a evaluar los siguientes rasgos, los cuales son muy buscados por las empresas:  

• Excelencia en las siguientes áreas: agilidad mental, agilidad para los cambios y agilidad interpersonal  
• Conciencia de sí mismo y sensatez
• Inteligencia fluida  
• Capacidad para manejar situaciones complejas mediante la agilidad de aprendizaje

Resumen

La agilidad de aprendizaje es una habilidad imprescindible para los empleados que aspiran a aprender, destacarse y prosperar en sus puestos dentro de su organización. Las empresas que tienen empleados con agilidad para aprender suelen experimentar una mayor productividad, con el consiguiente aumento de la rentabilidad.  

Las empresas exitosas deben adaptarse y sobrevivir en un mundo empresarial en constante cambio, por lo que deben contar con empleados con el entusiasmo y la capacidad necesaria para desenvolverse en este entorno tan cambiante. Si no están dispuestos a cambiar, las organizaciones deberán invertir mucho dinero y esfuerzos para buscar y reemplazar a los empleados que no van en la misma dirección.   

Si nos centramos en la agilidad de aprendizaje, obtendremos un doble beneficio: por un lado, las organizaciones obtendrán una mayor rentabilidad y, por otro, los empleados desarrollarán una mentalidad que los lleve a la introspección, a buscar nuevos retos, a trabajar en las deficiencias, a corregir el rumbo y a crecer. Los empleados con agilidad para aprender desarrollan las competencias necesarias para tener éxito a largo plazo en sus respectivos ámbitos de trabajo. Además, estos empleados pueden aumentar su competitividad y, por consiguiente, obtener nuevas oportunidades dentro y fuera de su organización.

Los mejores métodos para evaluar la agilidad de aprendizaje: 

• Aprovechar el potencial de las evaluaciones de agilidad de aprendizaje

A la hora de contratar colaboradores para puestos en los que debe tenerse en cuenta la agilidad de aprendizaje para prever los resultados (como puestos de liderazgo, directivos, etc.), las organizaciones deben incorporar en su proceso de contratación metodologías que permitan evaluar este atributo. Aquí es donde entran en juego las evaluaciones de agilidad de aprendizaje.

La prueba de agilidad de aprendizaje es una herramienta científica que las empresas pueden utilizar para identificar a los candidatos con una gran agilidad para aprender. Rigurosamente probada y seleccionada por expertos, la evaluación de agilidad de aprendizaje que ofrece Mercer| Mettl a través de su plataforma permite obtener un perfil integral del candidato, para que los reclutadores puedan seleccionar al candidato más adecuado para puestos que requieren esta habilidad. Si bien estas pruebas se utilizan de forma individual, se recomienda utilizarlas junto con otras herramientas psicométricas, como cuestionarios de personalidad o pruebas cognitivas, a fin de obtener una evaluación más completa.

• Combinar la agilidad de aprendizaje con la capacidad cognitiva

La capacidad cognitiva o de aprendizaje es un componente fundamental de la agilidad de aprendizaje. Una persona brillante no necesariamente tiene la capacidad de aprender de forma ágil, pero una persona debe tener una cierta capacidad cognitiva para tener agilidad de aprendizaje. Por este motivo, las pruebas cognitivas y las pruebas de agilidad de aprendizaje pueden utilizarse conjuntamente a la hora de evaluar candidatos.

Conclusión

La agilidad de aprendizaje es una competencia esencial que ha adquirido gran importancia en todos los procesos de reclutamiento. Entonces, ¿cómo podemos garantizar la contratación de empleados con esta habilidad? La respuesta es someter a los futuros empleados a una prueba integral de agilidad de aprendizaje. No cabe duda de que no es fácil identificar o cuantificar esta habilidad en una entrevista formal. Por lo tanto, la mejor solución es administrar pruebas de agilidad de aprendizaje personalizadas en función de cada puesto, ya que estos exigen diferentes niveles de agilidad para aprender. Avaladas por la ciencia y basadas en datos, estas evaluaciones son una forma eficaz de identificar el talento con agilidad para aprender.